Publicidad

Dolor rentable


Todo el dolor que se crea en el mundo es rentable, sin duda racional, es decir, todos atrapados inconscientemente en fuerzas culturales, económicas, religiosas, etc. (que determinan sí o sí prejuicios), nunca han podido evitar beneficiarse de algún dolor con el cual se han aventajado en algo en la vida.

Por ejemplo, del dolor de doscientas mil personas enterradas en las cunetas incuestionablemente ha beneficiado a las estrategias de la derecha. Por igual, el dolor de cualquier guerra es usado (con muchas propagandas) para convencer a la “opinión pública” de que “los otros” son los malos.

¡Claro!, el dolor es lo que más convence hoy en día, es evidente; y se usará siempre para ganar algo o para que algunos ganen algo. Del dolor de la reciente pandemia hubo millones que ganaron dinero hasta por las orejas, ¡y no hablemos del “caso mascarillas” con su gran botín de 2.000 millones de euros en poco tiempo!

En concreto, de que los pobres se hagan más pobres por cualquier crisis o causa es lo que más especulación requiere y más rentabilidad sutil-rápida produce. También el dolor de incontables niños trabajando en fábricas textiles en cualquier parte del mundo garantiza demasiado dinero para unos desalmados explotadores que se publicitan pillamente donando algún dinero a fundaciones benéficas. Ahí la astucia manda. Obvio.

El dolor que causa la contaminación es rentabilísimo para los que contaminan, pues lo aumentan muy egoístamente aumentando ellos la contaminación. El dolor de los toros (y de bastantes animales) ha hecho a muchas regiones ricas y prósperas. El dolor de las mujeres en muchos países orientales ha conseguido que millones y millones de hombres disfruten de impuestos y permanentes privilegios.

En el fondo, he de señalarlo, lo que produce más dolores rentables son las estéticas (la ética o la racionalidad jamás). Así que, sin demora y con hipocresía, se busca siempre un procedimiento protocolario o estético para esclavizar a los demás, sean cuales sean las consecuencias de interminable dolor. Sí, hasta los genocidios son mandatos estéticos de la patria de un país que no se evitarán nunca llegándose ya a una manipulación suficiente.

En suma, cualquier dolor masivo es rentable y los seres humanos de eso no aprenden ni aprenderán. Sí, seguirán así…

Uno de los motivos es que, la sociedad, es una gran competencia de intereses y de orgullos; y tal competencia (de aventajarse unos sobre otros) no funciona con amor o con decencia, he ahí que es necesario “ver débil” al que compite contigo, o sea, verlo con decadencia o con dolor.

Y, los que más dominan en algo (muchas veces porque influyen truculentamente en mucho), ya causar dolor es lo más habitual (con el máximo disimulo, ¡eso!, estéticamente hablando). Por eso pondré como última palabra:  asco.

 

José Repiso Moyano

 

 

Comentarios
    No hay comentarios
Añadir comentario
- campo obligatorio (*)

Normas de uso
  • Esta es la opinión de los internautas, no de El Faro de Málaga
  • No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
  • Reservado el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.