La moción de censura presentada por Ciudadanos, con el apoyo de PSOE y Podemos, al gobierno de la Comunidad de Murcia ha fracasado gracias a los votos de PP, tres diputados de C´s, y otro trío de señorías que fueron de Vox.
Siendo importante esta noticia, no lo es menos que aún falta por decidir qué pasará con la presentada por el partido de Inés Arrimadas en la asamblea de Castilla-León, con el apoyo del PSOE de Pedro Sánchez, y que tiene visos de fracasar.
Lo esencial en este viraje de Ciudadanos a la izquierda no es el resultado final de ambas mociones, sino en intentar conocer las causas que han llevado a Inés a ese cambio de política que, según se suceden los acontecimientos, pueden llevar a la desaparición del partido creado por Albert Rivera.
Para ello es necesario retroceder a las pasadas elecciones catalanas en las que el PSC de Salvador Illa -a pesar de obtener un muy buen resultado- no formará gobierno en la Generalitat, ejecutivo que, con total seguridad, irá a manos de Esquerra Republicana que, sin duda alguna, volverá a exigir la independencia de Cataluña y la libertad de sus dirigentes.
Es por ello que se prevé en el Congreso de los Diputados una muy difícil legislatura para Sánchez con la “tropa” catalana (Esquerra, Junts y CUP) mojándole la orejilla una y otra vez.
De ahí la necesidad, por parte de los moradores del Palacete de La Moncloa, de intentar atraer al grupo de Ciudadanos para que le sirva de muleta de apoyo, o sea, de socio, en las votaciones que se celebren en el Congreso.
Para ello, nada mejor que ofrecer al diezmado Ciudadanos cuotas importantes de poder, a saber: gobiernos de Murcia y Castilla León, Ayuntamientos de ciudades importantes, sirvan de ejemplo Zaragoza o Málaga, y otra posible moción de censura en la Comunidad de Madrid.
La avaricia ha roto el saco, y los de Inés van a perder hasta lo poco que tenían.
(Continuará)
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