Si alguien me preguntara o preguntase ¿quién es el prototipo para ti de “hombre de partido”? Ni lo dudaría un segundo: Simancas el de Madrid.
El hombre aguanta año tras año, quinquenio tras quinquenio y decenio tras decenio comiendo de la sopa boba de todos los españoles, pero lleva tatuado en su corazón el “tamayazo” de marras y le tiene una tirria horrorosa a todo lo que huela a PP sea bueno o malo.
Y es que Rafael se quedó grogui cuando un tal Tamayo, un compañero suyo del alma, lo dejó en pelotas delante de Esperanza Aguirre y ésta se hizo con la Presidencia de la Comunidad de Madrid y desde entonces, de forma ininterrumpida, ha vivido a costa de nuestros impuestos en toda clase cargos que existen en la capital del Reino, a saber: concejal, diputado de la Asamblea, Senador y Diputado al Congreso; y ello tiene mérito., aunque la derechona no lo reconozca.
Pero el buen hombre lleva clavado lo de la marquesa donde más duele y hoy, por ayer, ha arremetido contra la presidenta Ayuso a la que ha culpabilizado, junto al gobierno de la Comunidad, de los miles de fallecidos que el covid-19 ha provocado en España.
Si al menos hubiese achacado tal matanza a Franco la “cosa” tendría menos importancia, pues el pueblo español ya está acostumbrado a esos decires.
Tal vez mañana escriba sobre Franco sin “negritas”, tal vez.
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