Publicidad

La minería del carbón


     Actualmente el carbón mineral es un combustible muy rechazado por considerarlo uno de los responsables de la emisión de humos muy agresivos y otros efectos que fomentan el efecto invernadero, las pocas minas de carbón en España están abocadas al cierre.

     Esta columna es para enaltecer la imagen del minero del carbón, un gran olvidado, este mineral durante siglos ha contribuido a que nuestra civilización avance, la gran revolución industrial del siglo XIX, el motor fue precisamente el carbón, hoy las mayoría de las explotaciones de carbón caminan a su fin, quedan muy pocas minas y acabarán cerrando la mayoría, la demanda de esta materia ha descendido significativamente y además hay un mandato de la Comunidad Europea para España que obliga a devolver las subvenciones obtenidas por la empresas mineras desde el año 2011 hasta el actual.

     No obstante este mineral se seguirá utilizando ya que es imprescindible entre otras cosas para la obtención del acero, que es una aleación de hierro y carbono básicamente, a la que se añaden otros elementos para producir los distintos tipos que hay actualmente en el mercado.

    El carbón, que es una roca sedimentaria, se formo hace muchos millones de años por la transformación de grandes masas forestales y orgánicas que quedaron enterradas por diversas circunstancias.

    Hay variedades de carbón, el que tiene más poder calorífico es la antracita, Inglaterra tiene grandes yacimientos de este tipo de carbón utilizado en los altos hornos y acerías, le  sigue la hulla, el lignito y la turba.

    Los usos del carbón son muy diversos por lo que siempre se extraerá aunque se elimine su uso en determinadas actividades por el gran impacto ambiental.

  La minería del carbón es muy peligrosa salvo que se haga a cielo abierto, la excavación de pozos para obtenerlo tiene muchos peligros por eso la vida del minero de carbón es muy penosa y arriesgada.

   Uno de los grandes peligros que tenían las minas de carbón era el “grisú”,  es metano en su mayoría, aunque puede ir acompañado de otros gases como el etano; durante el laboreo de la mina de carbón se origina un  desprendimiento de este gas y cuando se acumula basta cualquier chispa para producir una gran explosión y ha sido el causante de la muerte de muchos mineros.

   Este problema se resolvió pues desde hace muchos años existen detectores de grisú en las galerías de las minas que avisan a los mineros de su presencia.

   Las minas de carbón impactan, a diferencia de otras, la paredes son negras por completo por lo que la iluminación que llevamos la absorbe la pared, tenemos una sensación de estar a oscuras aunque efectivamente no lo estemos pues nos ilumina la lámpara que utilizamos, las dos veces que he bajado a minas de carbón esta sensación de oscuridad impresiona, me decían que hasta que te habitúas, pero creo debe pasar mucho tiempo hasta que ocurra.

   Otro de los problemas que produce la extracción del carbón a los mineros es una enfermedad profesional que no tiene cura, es la neumoconiosis también se la conoce con otro nombre: la silicosis, el polvo de sílice que se desprende durante la extracción del mineral pasa a los pulmones y se almacena en los alveolos pues no hay forma de eliminarlo dañándolos, produce una insuficiencia respiratoria crónica, basta cualquier resfriado para poner en peligro su vida.

     La poca consistencia de las masas de carbón que es una roca sedimentaria, como hemos indicado, complica su extracción, ya que los derrumbes son frecuentes produciendo accidentes como sucede en las explotaciones con este tipo de rocas.

     Los mineros del carbón por las dificultades reseñadas y las enfermedades profesionales se jubilan a los 45 años, lo que da idea de cómo es su trabajo.

     La minería en nuestro civilizado primer mundo está regulada y protegida la vida del minero, pero en el tercer mundo las condiciones de trabajo son muy difíciles y penosas en las minas, pero de esto se habla poco, la demanda de materias primas de estos países, entre ellas el carbón, prima sobre otros aspectos

    

 

Comentarios
  • Miguel Diaz Alcaraz

    4 April 2018

    Gracias D. Manuel por su comentario. En el mundo en que vivimos llevamos desde hace tiempo anatemizando muchísimas cosas, vemos por ejemplo como se quiere reinventar la historia, vano empeño, pues la historia se escribe por los historiadores basándose en todo tipo de documentos, libros, prensa, películas, etc… no se hace una información sesgada como pretenden algunos.
    Sobre el carbón ha caído también un anatema, se le responsabiliza de muchos males al medio ambiente y nos olvidamos de su importancia y su necesidad en muchísimos procesos industriales, por ello se seguirá obteniendo.
    Me he querido fijar especialmente en la vida del minero de carbón, muchas de las ventajas, avances y adelantos de nuestra civilización no hubieran sido posible sin su arriesgado trabajo en las minas, dejándose su salud y a veces la vida en accidentes, creo que se merece el pequeño homenaje que he pretendido con esta columna

  • Manuel Rodríguez

    4 April 2018

    ¡Como se nota, Sr. Díaz, su Ingeniería de Minas! Como bien dice, el desarrollo industrial se basó en el carbón. La máquina de vapor, impulsora de ese desarrollo, se alimentaba con carbón ¡Qué decir de la locomotora de vapor! Hube de estudiarla en el año 54 para poder repararla en las partes de mi oficio ¡Cuántas personas!¡Cuántas mercancías! Transportaron en el orbe terráqueo; y aún transportan. Su bajo rendimiento motivó su desaparición a favor de otro tipo de máquinas que usan otros combustibles. Gracias por traerlo a nuestra consideración.

Añadir comentario
- campo obligatorio (*)

Normas de uso
  • Esta es la opinión de los internautas, no de El Faro de Málaga
  • No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
  • Reservado el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.