En Albacete, de donde vengo, había un mendigo, como lo había y lo sigue habiendo en cada ciudad o pueblo de España, que aparte de ser mendigo, era, también, un ser que se hacía notar por pedir cantando y jaleándose con sus propias palmas, le conocíamos por Nani. Había, así mismo, un "ricachón" de esos que, por suerte para ellos, tienen dinero hasta detrás de las orejas, que cada día pasaba por los "dominios" del Nani y lo ignoraba olímpicamente a pesar de que el mendigo le llamaba por su nombre, anteponiendo siempre el consabido "Don" de respeto. Aquel día el Nani tuvo suerte y en su mano apareció una moneda de diez céntimos, de las que entonces se usaban, a la vez que escuchó un consejo, que en boca de aquel hombre constituía más bien una orden..."Y no te lo gastes en vino" ...a lo que, a bote pronto, contesto el Nani, "No Don Paulino, me voy a comprar un coche". Los conocí a los dos y no recuerdo si lo he contado alguna vez, pero aún a riesgo de repetirme, les aseguro a ustedes que "viene a cuento en mi relato".
Y en estos meses de Enero y Febrero habrá en este País muchos "Nanis" que, como el de mi historia, "van a comprarse un coche", el Gobierno, por llamarle de algún modo sin usar adjetivos, ha subido las Pensiones de dos a cuatro Euros, entre el mínimo y el máximo y aun reconociendo que es enorme la diferencia de valor entre el céntimo de entonces y el euro actual, ninguno de los dos da para comprase no solo un coche, ni tan siquiera un simple bocadillo...pero la señora Ministra del ramo, a la que trataré como si fuera Ministro, que aquí no valen "distinciones", ha tenido la desvergüenza de dirigirse por escrito a cada Pensionista de este País, menos a mí que no entiendo el por qué no estoy entre los receptores, anunciándoles la "buena nueva"...¡Ostias, Pedrín! hasta donde vamos a llegar, porque no me digan ustedes que no es una desvergüenza que personas que han estado treinta o cuarenta años, los míos fueron cuarenta y dos, cotizando "religiosamente" sus cuotas correspondientes a la Seguridad Social en la confianza de una vejez digna, aparte de recibir una pensión, en algunos casos de miseria, tienen que soportar, encima, el ser tratados como "retrasados" o simplemente como tontos...en algunos lugares del mundo, creo, que los mayores o los viejos, que al menos a mí no me importa ser llamado así, son tratados con un mayor respeto.
Y la cosa de la célebre "cartita" todavía alcanza mayor gravedad cuando hemos sabido que el expedirlas a los Pensionista ha significado para el Ministerio un costo de ciento y pico millones de euros...teniendo en cuenta, creo, que los Ministerios entre si no pagan franquicia alguna, antes por lo menos era así, que alguien me explique y "desmenuce" todos y cada uno de los conceptos de la partida...partida que para nosotros, los ciudadanos de a pie, no deja de ser un tanto dudosa, ya que nos valemos de lo que se dice en los Periódicos y entre estos hay algunas diferencias. Pero sean unos los dígitos o sean otros, creo que la cantidad que sea bien repartida entre las Pensiones más mínimas hubieran sido más de agradecer que el contenido de una carta de "autobombo ministerial" como es el objeto de mi Grito...Señora Ministra cartas si, las que quiera, por desgracia hay muchos mayores que como "aquel célebre Coronel" no tienen quien que les escriba, pero le aseguro a usted que una carta con un simple mensaje de "recordatorio" hubiera sido para cualquiera de ellos más de agradecer que la "tontorrona" y laudatoria para ustedes mismos que han recibido...Y administren ustedes mejor los dineros a su cargo, que al fin y al cabo, es tan nuestro como de ustedes.
¡Ah! Y que conste que yo no pretendo criticar, digo nada más.
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