Comprar un teléfono móvil para un niño: cómo empezar y cómo seguir

Para un padre hay decisiones muy complicadas a lo largo de toda su vida, pero una de las primeras con las que siempre se va a encontrar, y más ahora que estamos más conectados que nunca, es sin duda saber cuándo comprar un móvil para niños. Los pequeños son cada vez más proclives a las nuevas tecnologías, es un hecho más que contrastado dado el entorno en el que se encuentran.

Sin embargo, ¿cuándo deben empezar a tener su primer móvil, qué modelos se aconsejan, cuándo tienen que subir al siguiente escalón? El adentramiento en la tecnología móvil debe ser gradual, ya que hay mucho que asimilar y mucho riesgo también en la red. Pero no hay que preocuparse. Si eres padre, aquí te vamos a ayudar con estas cuestiones tecnológicas.

Teléfonos móviles y niños: todo lo que necesitas saber

Vamos a abordar la cuestión de la edad, como también la de los modelos más acordes a medida que vayan pasando los años. Como hemos dicho antes, esta es una cuestión de tiempo y evolución progresiva. Poco a poco se va mejorando y ampliando en opciones para que finalmente el niño pueda y sepa usar el terminal móvil con total soltura, y también con cabeza. Esa última, de hecho, es la cuestión más importante de todas.

¿A qué edad se aconseja empezar?

Si nos ceñimos a la teoría, lo que vemos es que lo más aconsejable según expertos y padres es que los niños no tengan su primer teléfono móvil hasta los 16 años. No es hasta que llegan a esa edad cuando están realmente capacitados para usar sus terminales móviles, y más con todas las posibilidades que tienen a día de hoy. Sin embargo, tal y como decimos, esto es la teoría.

La práctica es muy diferente, y es que podemos ver a niños de 9 años usando smartphones con total soltura. La principal recomendación que se puede hacer en este ámbito es que un niño no tenga un teléfono completo como tal siendo tan pequeño. Puede que necesite un terminal, pero existen muchos modelos interesantes, bastante limitados en opciones, que son más que suficientes para empezar a experimentar con esta tecnología y ser localizables cuando resulta necesario. Y lo mejor, sin duda, es que empiecen a los 10 u 11 años.

Mejores móviles según edades

Precisamente por el apartado anterior conviene establecer diferentes tipos de móviles para diferentes rangos de edad. Como decíamos anteriormente, no es nada aconsejable que un niño de menos de 16 años tenga acceso a un dispositivo completo en prestaciones, conectividad y posibilidades, sobre todo porque internet puede ser de lo más útil y divertido, pero también bastante peligroso si no se usa adecuadamente.

De hecho, prácticamente se podrían establecer dos horquillas de edades. Una primera que vaya desde la toma de contacto con los terminales, entre los 10 y los 11 años de edad; y otra segunda que ya abarque desde los 16 en adelante, cuando el niño ya es mayor y puede tener más conciencia sobre los peligros que hay en estas tecnologías tan llamativas y atractivas.

Para la primera, podemos recurrir a modelos como este móvil de 5 pulgadas. Podemos encontrar incluso terminales como los Nokia 2.2 o los Alcatel 2008G, que renuncian a la usabilidad táctil y las aplicaciones. Estos dispositivos, aunque permiten la instalación de apps la mayoría, también cuentan con opciones que no permiten siquiera eso, como es el caso del Alcatel. Para el uso que van a darle al terminal, prácticamente para llamar o recibir llamadas, al igual que para enviar o recibir mensajes, es más que suficiente.

Llegados a los 16 años, ya podemos tirar los muros y abrir el abanico a la totalidad de smartphones que existen. A partir de los 14 años, de hecho, ya pueden crear y usar perfiles en muchas redes sociales, la mayoría establece los 14 como edad mínima para el acceso. Incluso se podría tomar dicha edad como punto en el que abrir esta segunda horquilla de edades de la que hablábamos antes.

Hasta cierto punto resulta incluso más lógico. Los jóvenes empiezan a salir más a la calle, quedar con amistades o incluso dormir fuera, y para eso ya sí es necesario un terminal. No vamos a dar muchas recomendaciones aquí, porque prácticamente cualquier modelo que equilibre bien precio y prestaciones es adecuado. Si buscáis algo que exprime al máximo la relación calidad/precio, siempre podéis echar un vistazo a marcas como Xiaomi, Oppo o Huawei.

También cabe la posibilidad de introducir un baremo intermedio entre ambas edades, a partir de los 12 aproximadamente. Ahí los niños pueden cambiar de modelo de móvil hacia uno que pueda contar con un control parental fácil de implementar. De este modo, ya empiezan a experimentar con determinadas apps, pero quedan fuera de riesgo con aquellas que no debieran usar. Generalmente, los terminales con sistema operativo Android ayudan mucho en esto.