Las emociones y el sello personal de Francisco Peinado abren la agenda expositiva de otoño

Anoche tuvo lugar en la pinacoteca principal de la Finca El Portón el acto de apertura de la exposición denominada ‘Rotaciones’ del veterano artista malagueño Francisco Peinado. Al evento acudió el alcalde Joaquín Villanova, que reanudaba su agenda pública tras varias semanas confinado; el concejal de Cultura, Andrés García, y vecinos del municipio que previamente habían comunicado su asistencia para evitar aglomeraciones. La inauguración se llevó a cabo teniendo en cuenta las medidas de seguridad y protección impuestas por las autoridades sanitarias.

El prestigioso pintor y escultor, afincado en Alhaurín de la Torre, imprime grandes dosis de talento, emociones y sensibilidad artística en cada una de las 40 obras que componen la colección, con un sello personal inconfundible, propio de un autor de trayectoria tan dilatada en el arte contemporáneo español.

El primer edil, Joaquín Villanova, afirmó que Peinado era un “genio” y una persona que ha estado toda su vida muy sacrificada. Asimismo, señaló que para los alhaurinos es un placer contar con una exposición de este creador. También quiso mandar un mensaje de esperanza y calma a los vecinos del municipio, debido a la situación que se está viviendo como consecuencia del Covid-19.

Por otro lado, el edil de Cultura destacó que es un orgullo contar con la exposición de un artista que tiene una amplia trayectoria y aseguró que desde el Área de Cultura seguirán apostando por una cultura segura.

El artista  tuvo palabras de agradecimiento para todos los asistentes y se mostró muy emocionado con las palabras que le dedicó el edil. Por último, subrayó que era una exposición, donde había tratado de plasmar sus emociones y en cierta manera, el aislamiento.

El Área de Cultura abre así su nueva temporada de exposiciones, que estará marcada por las medidas de seguridad y precaución por la situación sanitaria. Podrá visitarse hasta el 31 de enero en la Sala El Portón, cuyas dependencias se han adaptado en los últimos meses para evitar el exceso de aforo y facilitar la distancia social y las medidas de limpieza, higiene y desinfección.

DOCUMENTACIÓN

'Rotaciones' es el título de esta nueva propuesta que rinde homenaje al medio siglo de carrera artística de Francisco Peinado, autor malagueño afincado en Alhaurín de la Torre y de consolidada trayectoria. Se trata de una retrospectiva de su obra y una oferta expositiva de calidad, variada y de primera línea. Formada por unas 40 obras, este montaje es uno de los eventos más importantes dentro de la agenda cultural de Alhaurín de la Torre para el presente otoño.

Nacido en Málaga en 1941, Peinado vivió buena parte de su juventud en Brasil, donde se formó y comenzaron a trabar en él, como en un buen guiso a fuego lento, lo inusitado y lo caprichoso, la mirada limpia y curiosa, así como la crítica con sus propios sesgos, nunca evitados, aunque si confrontados con lo externo. Posteriormente vuelve a España y trabaja en Málaga. Tras una etapa en Colonia (Alemania) y Madrid, fija su residencia en la provincia desde 1979.

Malagueño universal y Premio de Andalucía de Artes Plásticas en 1992, ha expuesto de las mejores galerías del panorama internacional. Actualmente hay obras suyas en el MOMA de Nueva York, el de Museo Arte Abstracto de Cuenca, el Nacional Reina Sofía, el Español de Arte Contemporáneo, la Biblioteca Nacional de Madrid, el Ateneum Taidemuseo de Helsinki, el de Arte Moderno de Rijeka (Croacia), la Galería Nacional de Eslovaquia, los Museos de Arte Moderno de Bilbao, Fundación Rodríguez Acosta de Granada, Museo de Bellas Artes de Málaga, el Itinerante Salvador Allende y el Palacio de San Telmo en Sevilla.

Singular como pocos, inclasificable y con una extraordinaria atención al color, Francisco Peinado ofrece abundantes alusiones oníricas, con una deformación y distorsión de la realidad que raya en el surrealismo y lo irracional; un complejo imaginario que no deja indiferente a nadie y que se mueve entre la figuración, la abstracción, la escultura e, incluso, las puntadas, entre el color y la oscuridad, hasta completar una traslación, tan completa como libre, que le lleva a un estilo propio, inclasificable, sin etiquetas ni convenciones.