Alhaurín de la Torre mejora y embellece un cruce clave de las comunicaciones de Fuensanguínea

El Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre ha finalizado las obras de mejora de la rotonda donde confluyen la avenida de la Calera, la avenida de las Malagueñas y la avenida Mar Cantábrico, un punto clave de las comunicaciones de las urbanizaciones de Fuensanguínea y Huerta Alta, junto al instituto del mismo nombre. El alcalde, Joaquín Villanova, acompañado por concejales de la Corporación y miembros de la asociación de vecinos de Fuensanguínea, inauguró la glorieta, que supone una nueva imagen para la entrada a este sector sur del municipio.

El cruce se ha embellecido notablemente, con la creación de un mural con forma de castillo con sendas torres, decorado con dos bellos azulejos artesanos, uno en cada lado, que recrean escenas alusivas a la cultura andaluza. Además, se ha colocado un rótulo con el nombre de la urbanización y se mejorado el resto de la rotonda con pavimento de hormigón impreso y plantas ornamentales.

Villanova agradeció el trabajo de la artista local Herminia Serrano. Una de las cerámicas muestra la imagen de un patio andaluz y, la otra, un guitarrista y una pareja bailando flamenco, como homenaje al gran vínculo que mantiene Alhaurín de la Torre con este arte.

El alcalde apuntó que, dentro de plan de mejoras que efectúa el Ayuntamiento en colaboración con la asociación de Fuensanguínea, la última directiva pidió la transformación de esta rotonda, una medida que se ha llevado a cabo y que demuestra el éxito de la participación ciudadana. Además, hizo un repaso por todas las inversiones que se han realizado en esta urbanización, como la ampliación del patio de la sede social o la construcción de un servicio de aseo para los trabajadores porque “tienen que estar en las mejores condiciones”.

Asimismo, destacó que Fuensanguínea está en un sitio privilegiado por tener cerca el IES Huerta Alta e instalaciones deportivas. Por otro lado, los miembros de la junta directiva quisieron dedicar unas palabras de agradecimiento a Joaquín Villanova por atender siempre a sus demandas y por ser el “padre de esta urbanización”. Para finalizar la inauguración, tuvo lugar una comida en la sede social de Fuensanguínea.