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El Copo. Las cosas de Cádiz


Siempre viene bien algo de humor en cualquier tiempo, más cuando la “cosa del virus” huele tan mal como en estos momentos en que parece ser que estamos abocados a nuevos confinamientos, sean estos voluntarios o forzosos.

         Con motivo de la llamada Ley de la Memoria Histórica, el mítico estadio de fútbol gaditano ha dejado de llamarse Ramón de Carranza y ahora andan enzarzados sus socios en buscar un nuevo nombre para él.

         No voy a hacer que pierdan si tempo con la densa biografía del tal señor Carranza, laureado con la Cruz de San Fernando durante la guerra de las Filipinas, y varias veces diputado, senador y alcalde de “la Tacita de Plata”, significar solamente que era un hombre de derecha y que como tal se presentó a varias elecciones en las que “barrió”.

         En las elecciones municipales de 1931, las que dieron lugar a la II República, su candidatura fue la más votada en Cádiz -caso excepcional en España-, pero tuvo que dimitir por orden gubernativa. Murió por enfermedad en 1937, así que parece que poco tuvo que ver con las cunetas de la muerte.

         Kitchi, alcalde de Cádiz por Podemos, ha decidido en pleno municipal cambiar un par de calles y/o plazas que llevaban su nombre y borrar, como ya les decía, el nombre del estadio donde Mágico González hizo auténticas diabluras con la pelota.

         Se ha puesto a votación entre los socios del Cádiz el nombre que podría llevar el Estadio y el resultado de la votación ha sido el siguiente: el más votado ha sido el nombre de Ramón de Carranza, en segundo lugar Francisco Franco Bahamonde y cierra la terna Santiago Abascal.

         La cosa tiene guasa… y es que Cádiz es mucho Cádiz.

 

 

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