No sé si Ana Julia ha “cantado” ya el asesinato del pequeño Gabriel, es por ello que el título de este sencillo “copo” es un interrogante no sea que en caso contrario me “cruja” la dominicana por injurias, pero en fin todo parece indicar que ha sido ella la estranguladora de un pequeñín de siete años de edad y después de decirlo toda la prensa escrita, cantada, digital y televisada, no creo que nadie vaya a fijar su visión en este sencillo escrito exceptuando al grupo de amigos y amigas que puedan seguirlo, y algún que otro enemigo, no más de tres.
Y da la puñetera casualidad que viene a coincidir este infanticidio con el debate que se va a celebrar esta semana en el Congreso sobre la derogación o no de la Ley de Prisión Permanente Revisable promovido por el PNV, y que cuenta, por ahora, con el apoyo de PSOE, Podemos, Esquerra y algún partidillo más; C´s anda en la duda y exige algo a cambio para que permanezca vigente, mientras que el PP de Mariano Rajoy, el enemigo a abatir por todos, desea seguir manteniéndola porque fue esa formación política la que la aprobó hace tres años. Este párrafo viene a cuento porque siempre se argumenta que no hay que legislar “en caliente”, y ese debate se espera esté “al rojo vivo”, por muy santa que sea Patricia, la madre del chavalín asesinado, que sin duda lo es.
Viene esto a cuento porque tras las algaradas de anoche en el pueblo donde ha acaecido el hecho, numerosos vecinos han solicitado la pena de muerte y/o la cadena perpetua para Ana Julia -algunos hasta han gritado “que la suelten”, para tomarse ellos la justicia con sus manos- han aparecido los primeros apóstoles del progresismo. Al primero que he escuchado ha sido a Ignacio Escolar, que con fe ciega y como el que no dice nada, ha asegurado hoy en La Sexta que eso lo gritan porque Ana Julia es “mujer y negra”; para qué hablar de los twuits que inundan las llamadas redes sociales, particularmente les recomiendo el de Mongolia.
Ya que algunos, también algunas, me tildan de no “mojarme”, hoy lo hago: “Dejo constancia de mi deseo para que siga vigente la Ley de Prisión Permanente Revisable porque, entre otros supuestos, apuesta porque se revise la salida de prisión antes de cumplir su condena de los asesinos de niños.”
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